Mesones refrigerados y vitrinas, lo óptimo para exhibir estos productos

“Es importante para ayudar a su venta que las cecinas y los embutidos tengan tanto el precio como la marca muy a la vista”, afirma Carlos Raggio, gerente de Club Almacén.

Existen distintos tipos de vitrinas y mesones refrigerados para exhibir las cecinas y los embutidos en el negocio, pero, según asegura Carlos Raggio, gerente de Club Almacén, “no da lo mismo usar cualquiera de ellos”.

Teniendo esto claro, señala que “es importante que el comerciante cuente con una vitrina o exhibidor que le permita mantener las cecinas y embutidos en un rango de entre 2 y 6 grados, o hasta 5 grados Celsius, si uno es más exigente. De lo contrario, el almacenero se expone a que estos productos entren en un proceso de descomposición, lo que deriva en la pérdida del producto y por ende también una pérdida económica. O incluso peor, en la pérdida de clientes”.

A continuación detalla que “estos productos debieran ser exhibidos de tal manera que le permitan al cliente comparar alternativas para que elija su producto favorito”.

Además, en estos tiempos de crisis, cuando cada moneda cuenta, “el almacenero debería ofrecer a sus clientes alternativas económicas y sabrosas, como la mortadela o jamonada. Pero también debería incorporar diversas alternativas de jamón, junto con salame y cervecero para quienes gustan de productos más salados. Y quienes buscan alternativas de embutidos para acompañar el almuerzo, deben encontrar vienesas, longanizas o chorizos en el negocio”.

Consejos del que sabe

Raggio también aprovecha de entregar unos consejos a fin de mejorar la venta de cecinas y embutidos.

“Es importante para ayudar a su venta que las cecinas y los embutidos tengan tanto el precio como la marca muy a la vista. Esto, porque en general al consumidor le molesta tener que esperar que lo atiendan para recién saber esa información, que es muy importante a la hora de tomar la decisión de comprar”, señala.

Otra recomendación es que “cada día el almacenero corte la primera rebanada, que normalmente ha sufrido el óxido, de tal manera que la cara visible esté siempre fresca. Y también está la opción de envolver el corte con un plástico transparente, de tal manera de evitar su oxidación”.

Por último, “y lo más importante, es que el comerciante debe conocer sus productos, debe probarlos y conocer cada variedad”.

Fuente: https://www.lacuarta.com/